Un total de 2,619 reclusos se han recuperado del COVID-19
Un total de 2,619 reclusos se han recuperado del COVID-19. El Instituto Nacional Penitenciario (INP), registró durante la pandemia del coronavirus, 2,675 privados de libertad contagiados en los centros penitenciarios del país, de estos, se recuperaron 2,619, es decir el 98 por ciento, con un saldo de cinco muertes.
Actualmente, de acuerdo con el informe se mantienen activos 17 casos asintomáticos, que no han necesitado referirlos a los diferentes hospitales.
Durante el año, se brindaron un total de 161,123 atenciones médicas a las personas privadas de libertad que conviven en los 25 centros penitenciarios y los tres anexos a nivel nacional, informó el Departamento de Salud del Instituto Nacional Penitenciario (INP).
Para la adecuada atención de las personas privadas de libertad contagiadas y prevenir el contagio del resto de internos, el INP contrató a 63 médicos los cuales fueron distribuidos en los establecimientos a nivel nacional, logrando en conjunto con la Secretaria de Salud (Sesal) realizar 8,065 pruebas para detectar el virus.
A lo interno de las cárceles se distribuyeron insumos de bioseguridad para las personas privadas de libertad y el personal asignado a cada establecimiento, con fondos institucionales se compró tratamiento “Maíz”, entre otros indicados para las personas con enfermedades base y así evitar que decaigan en su estado de salud.
También para brindar la mejor atención se adquirieron ocho tanques de oxígeno los cuales se distribuyeron en los establecimientos que albergan la mayor población. En el Centro Penitenciario Nacional de Támara (CPNT) se habilitó un laboratorio para procesamiento de análisis de química sanguínea que ayudan al monitoreo del sistema inmunológico.
Junto a la Sesal se acordó el abordaje quirúrgico para la atención de las personas que conviven en los centros penitenciarios de Támara, Penitenciaria Femenina de Adaptación Social (PNFAS) y El Porvenir “Siria”, todos en el departamento de Francisco Morazán.
Asimismo, se coordinó la atención para las personas que padecen de enfermedades psicológicas y que reciben tratamiento en el Hospital Psiquiátrico Mario Mendoza y Santa Rosita, garantizando de igual manera el suministro de medicamentos para cada uno de ellos.
Los doctores informaron que durante la “visita especial”, solicitada por las autoridades del INP a la Sesal y al Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager), se atendió para el cumplimiento de bioseguridad a 3,235 familiares de las personas privadas de libertad que llegaron a los diferentes establecimientos para reunirse con su pariente.
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