Por: Carlos G. Cálix
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En el ya aludido primer discurso, la señora Presidenta Xiomara Castro dijo: “No más escuadrones de la muerte, no más silencio ante los feminicidios, no más sicariato, no más narcotráfico, ni crimen organizado”, luego de haber mencionado que “la refundación de Honduras comienza por el restablecimiento al respeto del ser humano, la inviolabilidad de la vida, la seguridad de los ciudadanos y ciudadanas”.
Pero, al final eso solo era un discurso, una especie de promesa por cumplir sin fecha estipulada. Aunque, durante las primeras semanas de abril de 2022, la señora Presidenta felicitó al presidente del Congreso Nacional Luis Redondo, tras la aprobación del nuevo Presupuesto General de la República.
Ante ello, es necesario recordar que la denominada refundación, “comenzará por el restablecimiento al respeto del ser humano”, según dijo la señora Presidenta. Pero, ¿comprenderá lo que esto significa? -No lo sé- pero quien puede ayudarnos a entenderlo es Lawrence Kohlberg, discípulo de Jean Piaget. El autor menciona que, hablar del valor del respeto es hacer referencia a una actitud moral por la que se aprecia la dignidad de una persona y se considera su libertad para comportarse tal cual es, de acuerdo con su voluntad, intereses, opiniones, sin tratar de imponer una determinada forma de ser y de pensar. Entonces, si respetar es considerar la libertad para comportarse de acuerdo con intereses y opiniones, ¿qué hay de aquellos militantes y dirigentes que no están de acuerdo con la forma en la que la cúpula gestiona un partido?
En este mismo sentido, sobre el respeto del ser humano, Víctor M. Martínez Bullé-Goyri, en su artículo “Reflexiones sobre la dignidad humana en la actualidad”; expresa que la democracia y los derechos fundamentales comparten su estrecho vínculo e incluso a nivel de fundamento con la idea de la dignidad humana. No obstante, en defensa de la dignidad se sostienen posiciones radicalmente contrarias en temas centrales de la vida cotidiana como el aborto.
Lo anterior conlleva a efectuar un breve análisis sobre la inviolabilidad de la vida, puesto que fue uno de los temas abordados en el discurso de la señora Presidenta, sobre todo cuando, nuevamente los grupos autodefinidos feministas comiencen a pedir la legalización de la PAE y del aborto. Precisamente, debo acentuar que fue a través del decreto No. 54-2009, en el cual se prohibió la promoción, uso, venta, compra y cualquier política o programa relacionado con la Píldora Anticonceptiva de Emergencia (PAE), con fundamentos en los artículos 216 y 245, atribución 33 de la Constitución de la República.
No obstante, con el logo del Partido Libre, el Grupo Estratégico por la Legalización de la PAE (GEPAE), presentó en 2022 una propuesta denominada Restitución de la Pastilla Anticonceptiva de Emergencia (PAE) Categoría “C”: Derogación del Acuerdo Ministerial 2744-2009, aprobado por el gobierno de facto (Secretaría de Salud) luego del golpe de Estado y efectuando una fundamentación en los derechos humanos.
En la misma iniciativa promovieron que a partir de 2023, se requiere que dentro de la partida presupuestaria de compra de medicamentos e insumos de planificación familiar se incluya la anticoncepción de emergencia de Levonorgestrel. Al respecto, algunos grupos pro-vida consideran que, al abrir la puerta de la legalización de la PAE, también se abrirá la puerta para considerar el aborto legal como una opción, tal como ocurrió en Argentina y en Colombia, de acontecer esto, la señora Presidenta deberá de explicar qué quiso decir en con “inviolabilidad de la vida”.
Por otra parte, sobre la “seguridad de los ciudadanos y ciudadanas, el no más escuadrones de la muerte, el no más silencio ante los feminicidios, el no más sicariato, el no más narcotráfico, ni crimen organizado” el gobierno sigue en deuda antes de la “refundación”, puesto que la cifra de homicidios en Honduras, aumentó un 3.2 % en el primer bimestre del 2022, frente al mismo lapso de 2021, según estadísticas consultadas por EFE.
El segundo semestre de 2022 está por comenzar y seguimos a la espera que la señora Presidenta deje de decir: ¡No más inseguridad! Y comience a expresar: ¡Lo logré o lo logramos!
De hecho, antes que 128 congresistas argumenten sobre estos temas, deberían de preguntarle a la población si estaría de acuerdo con la legalización de las PAE y del aborto con excepciones.
Tomado del libro “La señora Presidenta ¿Una solución o un problema? Y publicado bajo la sección “El restablecimiento del respeto y la inviolabilidad de la vida”.
[email protected] Carlos G. Cálix es profesor del Doctorado en Dirección Empresarial en la UNAH y cofundador de diversas empresas. Tiene un postdoctorado por el CONICET en el IIESS-Argentina. Autor de El fin de la democracia y el último liberal, El modelo de desarrollo que La Ceiba necesita y La Señora Presidenta ¿Una solución o un problema?
