El gran referente

MA/24 de February de 2020/07:15 a.m.

Dennis Castro Bobadilla

Hablar es fácil, y como no se le puede mandar la boca a nadie… Sin embargo, aquellos que tienen la obligación de no mentirle jamás a su pueblo, deberían medirse un poco antes de vender ilusiones, de regalar sueños a los que siguen esperando que, en realidad, las cosas mejoren en Honduras.

Nuestro país será el referente en Centroamérica de los grandes cambios, de los grandes logros y de las grandes transformaciones sociales. Tendremos las mejores carreteras, los mejores puertos, seremos referentes en producción agrícola, en servicios de salud pública, tendremos la mejor educación, seremos ejemplo a seguir en materia de seguridad y, ¿por qué no decirlo de una sola vez? Seremos una sucursal del cielo en la tierra! ¡Un paraíso donde todo será felicidad, paz y bienestar!

Un día, Hitler dijo que la suya era la raza superior, y poco le faltó para agregar que había sido hecha por la propia mano de Dios. Por supuesto, Hitler es, por antonomasia, el mayor demagogo del siglo XX, aunque por estos rumbos tiene algunos rivales dispuestos a romper su propio récord.

La verdad, es que Honduras es el gran referente en violencia, en corrupción, en pobreza, en miseria, en hambre, en niñez desprotegida, en política vernácula e improductiva, en confrontación social, en demagogia, en depredación del bosque, en destrucción del medio ambiente, en violación a la Constitución y las leyes, en muertes por enfermedades fácilmente prevenibles, en emigración masiva, en derroche de los recursos del pueblo, en fin…

Servir como referente positivo es uno de los grandes honores que puedan recaer sobre nuestra patria, sin embargo, la verdad hay que decirla porque ya basta de que se nos sigan vendiendo sueños, que se nos siga llenando la cabeza de ilusiones, y de que se nos siga mintiendo descaradamente. El pueblo hondureño no es tonto. El pueblo sabe cuando le están mintiendo. Sencillamente, la realidad no se equivoca, y lo que está a la vista no necesita anteojos. Dos carreteras buenas y mil deterioradas, de esas carreteras quiebra carros. Tantos aeropuertos y solo cinco mangas para que los pasajeros suban a los aviones, hospitales vacíos de medicamentos, la inseguridad dominando las calles, los corruptos corriendo a la MACCIH para seguir saqueando el país… y así se nos dice que seremos el referente en esto y en aquello, cuando, realmente, ya somos el gran referente en Centroamérica y en el mundo, y nuestros dirigentes son el mejor ejemplo de cómo no se debe gobernar y administrar un país, a menos que lo que se quiera es llenar los propios bolsillos.

¡Pobre Honduras! Tan lejos del cielo y gobernada por mentirosos.