Un fuerte contingente de la Policía Antimotines se aprestaba este lunes a ingresar a la Penitenciaría Nacional, donde se reportó una balacera y detonaciones de supuestas granadas.
A las 9:30 de la mañana, los uniformados con escudos, toletes y cascos estaban listos para ingresar para tomar el control del centro carcelario.
El portavoz de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina), José Coello, dijo que desde que se produjo el hecho el Instituto Nacional Penitenciario tomó el control de la prisión.
De igual forma, alertaron a los cordones de seguridad que se encuentran en el exterior de la cárcel para estar alerta.
El supuesto amotinamiento se produjo a las 7:00 de la mañana, según Coello, quien además dijo desconocer si hay heridos y cuántos podrían ser.
El ingreso de los efectivos antimotines es para realizar un operativo en búsqueda de armas de fuego y otros objetos prohibidos para los internos.