“El Sisimite de El Olingo” desata curiosidad en montañas de El Paraíso (Video)

ZV/10 de May de 2021/05:58 p. m.

DANLÍ, El Paraíso. La aparición entre las montañas de El Olingo de Las Ánimas y El Bijao, en Olancho, de un extraño hombrecillo ha causado temor y curiosidad por su fisonomía, de un metro de estatura, abundante cabello crespo y barba, de pocas palabras y una malformación en los pies y al principio creían que se trataba de un mítico duende o “El Sisimite”.

Alguna gente de esta región fronteriza con Nicaragua, llegó incluso a bautizarlo como “El Sisimite de El Olingo”. Esto porque “El Sisimite”, en la tradición oral hondureña, es un ser sobrenatural, una criatura que habitaría en montañas y cavernas, cuyas primeras historias fueron relatadas en 1850.

Narradores de historias explican que “El Sisimite” no es carnívoro, pero cuando baja de la montaña lo hace en busca de una mujer para ser raptada y llevada hasta su caverna y procrear hijos, que también nacerían con la misma fisonomía.

Parte de la familia de Marco Aurelio Galindo habita en esta zona montañosa de El Paraíso, fronteriza con Nicaragua.

CURIOSIDAD

En este caso, el misterioso hombrecillo acaparó la mirada y curiosidad de los habitantes de la zona de Las Ánimas, con videos y fotos que se hicieron virales en las redes sociales. Se han contado historias casi sobrenaturales y es que al seno de los pueblos se crean leyendas que incrementan el acervo de la tradición oral.

Pero esta historia es diferente a lo sobrenatural, según lo relata su hermano, Abel Galindo García. “Es mi hermano y se llama Marco Aurelio Galindo, tiene un poco más de 40 años, él no es enano, lo que pasa es que cuando vivía en Estados Unidos pasó una helada y, al parecer, se le congelaron los pies y se los tuvieron que cortar, eso fue hace unos ocho años, así fue deportado ya con esa discapacidad”, reveló.

Eso explica la extraña forma en que camina Marco Aurelio, como dando pequeños saltos y arrastrando los pies con unos zapatos desgastados y amarrados hacia atrás, que le llegan al borde de un pequeño pantalón raído que viste.

“Él siempre pasa en casa donde nosotros le ayudamos, pero ahora anda drogado y por eso anda errante y diciendo incoherencias”, señaló el hermano.

Marco Aurelio o “El Sisimite de El Olingo”, no habló con nadie y salió rumbo a las montañas de nuevo.

ENTRE MONTAÑAS

“Mi hermano no tiene ni esposa ni hijos, no pudo tener familia, lamentablemente, nosotros lo cuidamos y lo alimentamos, aprendió a desplazarse así con su problema en los pies, pero no es malo ni agresivo, por ahora desconocemos su paradero, porque anda errante entre las montañas de Olancho y El Paraíso, pero su casa es en El Bijao”, detalló.

Los vecinos de la zona lo vieron con extrañeza y más aún con las historias que relató, ya que aseguró que tenía 100 años, que dormía en una montaña, a la orilla de un río y que se alimentaba de flores y frutas silvestres y por esas declaraciones y su apariencia los vecinos lo nombraron “El Sisimite de El Olingo”.

Cuando se trató de conocer más detalles sobre el hombrecillo ermitaño, solo se supo que había tomado el rumbo de las montañas de Olancho y que, blandiendo un pequeño machete, exclamó que no quería saber que lo seguían, mucho menos ofrecer entrevistas y prefería seguir su vida entre las montañas alejado de la gente. (Celenia Rodríguez)

En la comunidad de Las Ánimas poco se habla del tema del extraño hombrecillo en sus montañas.