El analista Arístides Mejía, manifestó que el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el Registro Nacional de las Personas (RNP) deben trabajar de la mano para sacar procesos electorales de altura.
Sobre estos dos entes recae la buena o mala organización de los comicios electorales, pues uno es quien identifica a las personas y el otro es quien crea el censo electoral.
En los últimos tres años ambas instituciones afrontaron una gran reforma, pero para las elecciones internas se votó con un censo electoral a medias y el sueño de la nueva identidad se ha visto entorpecido por falta de planificación.
“Todos sabemos que algo anda mal con esto de la cédula, ha habido una planificación y el RNP se justificó diciendo que tuvo atrasos por la pandemia, eso es comprensible; pero no por fallones del software”, manifestó.
“Lo que pasa es que desde ahí para acá hay un conflicto enorme entre el CNE y el RNP, que son dos instituciones que tienen que coordinarse porque uno elabora el listado de los ciudadanos y el otro elabora el listado electoral”, indicó.
Aseguró que “el uno no puede trabajar sin el otro, me refiero al caso del Consejo Nacional Electoral”.
Mejía lamentó la forma en la que se ha venido entregando el nuevo Documento Nacional de Identificación (DNI) a tal grado que asegura desconfiar que para las elecciones generales todos los ciudadanos la tengan en su poder.
“Nos explicaron las fases en que se van a entregar las identidades, nos dijeron que se iba a acelerar el ritmo de entrega, pero eso no se está cumpliendo”, señaló.
“En ese momento nos dijeron que faltaban 2.6 millones de identidades, una cantidad muy grande y que en dos meses se terminaría con el proceso” mencionó.
“El RNP debe aclarar qué es lo que está pasando por qué no se ha ejecutado el cronograma y creo que tampoco el contrato”, finalizó.
Dato
Más de dos millones de identidades debe entregar el RNP en exactamente un mes.