Noé Pineda Portillo
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La Semana Morazánica o Feriado Morazánico, viene desde 1914, o sea, desde inicio de la época presidencial del actual gobierno. Esto es el producto o resultado de la improvisación gubernativa, de lo que se hace según van sucediendo las cosas, de lo que se le ocurre a alguien en ese momento y hay que hacerlo porque se ve bonito, sin hacer un examen previo.
Decimos esto, porque el tal Feriado Morazánico no tiene ninguna concordancia, a menos que sea la poca cosa del mes de octubre donde se suceden tres feriados: el 3 de octubre en honor al nacimiento de Francisco Morazán, el 12 de octubre en honor al “Día de la Raza” o “Hispanidad” y el 21 del mismo mes en honor a las Fuerzas Armadas de Honduras.
Ninguno de los tres feriados tiene alguna relación estrecha de festividad cívica entre uno y otro, son fechas distintas en el tiempo y aún en el espacio como sucede con el “Día de la Raza”, tampoco en el objetivo en cada fiesta llamada “cívica”.
El “civismo” como tal viene del latín o romano que significa amor ciudadano o amor patrio, pero como sabemos hay hechos, acciones o eventos en la vida de las personas o comunidades que no son patrióticos. El civismo, es a la vez, la serie de cualidades que caracterizan al buen ciudadano. Tal como nos lo señalan los manuales cívicos escolares, que llevan como objetivo fundamental desarrollar en los educandos, el conocimiento y sentimiento de valores cívicos, éticos y morales, fortalecer la convivencia y solidaridad en la familia, en la escuela y en la comunidad.
La conciencia cívica está en las personas individuales y en la sociedad como grupo de convivencia. Puesto que cambian, las sociedades poseen un pasado y los cambios tienen un significado histórico y cultural. Dentro de todo lo que cambia, hay cosas que conservamos y cosas que olvidamos. Actualmente, mujeres y hombres se preocupan cada vez más por conservar y respetar la herencia de sus antepasados que, a su vez, será su legado para las generaciones futuras.
Nosotros como docentes que nos tocó trabajar en los tres niveles, primaria, secundaria y terciaria o universitaria, tuvimos que servir la educación cívica y entendemos que mucho ayudó en la formación ciudadana.
Todos los países civilizados establecen un espacio de tiempo para el ocio constructivo para sus habitantes trabajadores, de la oficina, taller o del campo; psicológicamente se ha demostrado que la gente rinde más en su trabajo cuando después del sofocante calor se pase al descanso, luego continúa su trabajo, rinde más. Por eso, se regularon, a petición de los mismos trabajadores, las semanas de trabajo de 48, 44 y ahora se pide la de 40 horas de trabajo. Los períodos de descanso o vacaciones, se están pidiendo para los días de “verano” o de extremos “inviernos”. Siempre pensando en el mayor rendimiento.
En nuestro caso, la “Semana Morazánica” debe analizarse mejor y trasladarse con otro nombre a otro espacio de tiempo y no seguir jugando con el nombre del prócer que sigue siendo nuestra insignia patria.