La Habana, 14 dic (EFE).- La Alianza Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (ALBA) respondió con una mejor articulación a la crisis de la pandemia y el recrudecimiento de las sanciones económicas de EE.UU., resaltó este martes el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, al inaugurar la XX Cumbre de este mecanismo.
EE.UU. reforzó “los planes de dominación y hegemonía” en estos años, afirmó el gobernante cubano frente al plenario de la cita, donde destacó también que “en medio del peor vendaval que haya enfrentado el mundo, el ALBA no perdió el rumbo”.
Díaz-Canel agradeció la ayuda humanitaria enviada a Cuba por varios países de la alianza durante “los momentos más duros de la pandemia” y reiteró el apoyo a sus homólogos de Bolivia (Luis Arce), Nicaragua (Daniel Ortega), Venezuela (Nicolás Maduro) y otros representantes de seis países caribeños que asisten a la reunión.
Mencionó que las vacunas cubanas contra la covid-19 “se comparten con otras naciones de la Alianza, al tiempo que destacados profesionales y técnicos cubanos de la salud cooperan en la asistencia sanitaria”.
El presidente cuestionó la Cumbre por la democracia de la actual administración de EE.UU. y aseguró que era “un acto profundamente hipócrita”.
Expuso que Cuba es el principal objetivo de la “obsesiva política de persecución del gobierno de EE.UU.” que “utilizó la pandemia como aliada” para “derrocar a la Revolución”.
La cita en La Habana, que coincide con el 17 aniversario de la fundación del bloque, se centra en las consecuencias de la pandemia y las vías para la integración económica de sus estados miembro.
Tras la bienvenida oficial, las delegaciones realizarán una reunión a puerta cerrada de unas cuatro horas.
Actualmente, la ALBA cuenta con diez miembros (Antigua y Barbuda, Bolivia, Cuba, Dominica, Granada, Nicaragua, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, y Venezuela) y dos invitados especiales (Haití y Surinam). EFE