El Colegio de Periodistas de Honduras (CPH) distinguió con el premio “Álvaro Contreras” a Enma Calderón, una profesional multifacética en los medios de comunicación y la primera periodista en cubrir la nota roja en el país.
“En un momento reciente, pensé retirarme del periodismo”, confiesa Calderón, en una charla telefónica con Diario LA TRIBUNA y quien se desempeña actualmente como directora de Prensa del canal 9, VTV.
Con esta designación, el CPH reconoce su carrera de 36 años, desde sus inicios como reportera, asesora de comunicaciones, estratega publicitaria, especialista en manejo de campañas políticas, productora y presentadora de televisión y administradora de su propia empresa de comunicaciones.
Enma Evangelina Calderón Umanzor nació en Choluteca, en un hogar ligado al mundo de la política. Su madre fue diputada suplente por Valle, de la Asamblea Nacional Constituyente de 1980.
Se graduó de maestra de Educación Primaria en la otrora Escuela Normal de Señoritas “Villa Ahumada”, con sede en Danlí, El Paraíso, y obtuvo la licenciatura en Periodismo en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
“Una de mis frustraciones fue no ejercer el magisterio, espero hacerlo en las aulas universitarias”, confiesa.
AMPLIA TRAYECTORIA
Calderón se inició en el periodismo en 1986, en la Secretaría de Prensa del gobierno del expresidente José Simón Azcona. En aquellos tiempos, esta dependencia gubernamental funcionaba como un verdadero medio de comunicación y los periodistas tenían que hacerlas de reporteros.
Para muchos, como Calderón, fue su primera escuela. De ahí saltó a Diario LA TRIBUNA, donde desarrolló una destacada carrera cubriendo todas las fuentes.
“Solo me faltó escribir para deportes”, recuerda con una carcajada. Su primera prueba de fuego, sigue relatando, fue la nota roja, que por ese tiempo tenía una particularidad: Solo periodistas varones cubrían esa fuente. Ella, además de mujer, era novata. “Me miraban raro, todos se sorprendieron”, relata.
Con todos ellos, sin embargo, se introdujo en el mundo del hampa de la capital, persiguiendo delincuentes, cubriendo allanamientos, asaltos, crímenes; muchas veces subida en la “paila” de las patrullas policíacas o en la motocicleta de los fotógrafos.
No tardó mucho tiempo en ser reasignada a otras coberturas, entre estas, política, Casa Presidencial y el Congreso Nacional. Esta etapa, admite, fue la mejor experiencia en su carrera. “He pasado por muchos medios, pero LA TRIBUNA es mi casa. Mi escuela verdadera”.
EXITOSA EMPRESARIA
En 1998 renunció a LA TRIBUNA para asumir como directora de comunicaciones del entonces presidente del Congreso, el extinto profesor Rafael Pineda Ponce, donde organizó la Oficina de Prensa.
Su buena relación con el recordado político le permitió ser parte del equipo de campaña en su postulación presidencial, que perdió contra el candidato nacionalista de turno, el expresidente Ricardo Maduro, en las elecciones generales del 2001.
Tras esta provechosa experiencia, se retiró un tiempo del periodismo, pero regresó para gerenciar varios proyectos en medios de comunicación, incluyendo su propia empresa televisiva.
También contrajo matrimonio, todo un acontecimiento en el gremio, puesto que siendo una mujer muy guapa y cotizada, se mantuvo soltera hasta los 42 años. -Su boda dejó muchos corazones rotos en el medio-, le digo. “Nunca lo supe, a mí nadie me dijo nada”, responde con una nueva carcajada. “Lo que sí te puedo decir, es que hallé el amor con mi actual esposo, Francisco Pon, mi brazo de apoyo en mi vida”. No tiene hijos.
“NO ME LO ESPERABA”
Con respecto a la decisión del CPH, de entregarle su máximo galardón, la periodista asegura que no se lo esperaba. “Me ha sorprendido, pero pienso que los tiempos de Dios son perfectos”.
Después de conocer la designación, agrega, se ha dado un tiempo para repasar su carrera y todas las personas que siempre la apoyaron en los momentos buenos y malos. Asegura que sigue disfrutando el periodismo como en sus inicios, aunque en un momento reciente pensó retirarse.
“Pensaba dedicarme a mis proyectos personales, siempre ligado a los medios, pero luego me salió esta oportunidad en VTV y es como encender esa chispa, el gusto por la noticia”.
La premio “Álvaro Contreras” considera que los medios convencionales atraviesan por una etapa compleja, en medio de la pandemia y tantas “fakes news” de las redes sociales, pero asegura que no es el fin para ellos. “Es un hecho el poder de la tecnología, pero el periodismo informativo esencialmente sigue siendo el mismo, la labor de los periodistas, cuando se haga con veracidad, no tiene por qué morir”, subraya. (EG)