El Partido Nacional emitió ayer un comunicado, en el que se queja del despido de los empleados públicos y de las violaciones a sus derechos humanos.
Los azules condenamos la persistente violación al derecho humano y al trabajo digno, que sigue con el despido masivo de empleados públicos, la mayoría de ellos con años de antigüedad y probada idoneidad, pero que su “delito” es haber trabajado en gobiernos nacionalistas.
“Como bancada del Partido Nacional, nos solidarizamos con los miles de hondureños, ya sean nacionalistas o de otros partidos, que están siendo despedidos injustificadamente, y en especial con aquellos que pertenecían a la Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social (SEDIS) y la antigua Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos (INSEP), quedando sus prestaciones sujetas, groseramente, a una incierta disponibilidad presupuestaria. Ofrecemos nuestro firme apoyo a sus gestiones legales”.
“Pedimos un no al silencio y exigimos a la Organización Internacional del Trabajo (OIT), a la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, al Comisionado Nacional de Derechos Humanos de Honduras, y demás organizaciones defensoras de los derechos humanos, que se pronuncien e interpongan acciones inmediatas, para frenar esta ilegal e inhumana ejecutoria”, concluye el comunicado.