Autor: Luis Alonso Gómez Oyuela
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DANLÍ, EL Paraíso. Quien ama su profesión trabaja con dignidad. Su visión es el puente entre el presente y el futuro. Sin ella morimos o nos desenfrenamos. La visión da propósito a la vida. Dice Paulo Coelho: “Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida, si insistes en permanecer en ella más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del resto… y agrega, no podemos estar en el presente añorando el pasado”.
Lo anterior define la imagen de Mercedes Gamero, tras siete años de fecunda labor dirigiendo en calidad de Coordinadora del Centro Regional Universitario de la Universidad Pedagógica “Francisco Morazán”, cargo que ejerció desde el 2016 al 2023, donde hizo sentir su presencia, mostrando un carácter firme y seguro; propio de una profesional competente.
Durante los siete años de servicio, la licenciada Gamero, marcó una ruta diferente en la formación de profesionales capaces de lograr cambios en la educación nacional, ademas, vinculó a la Universidad con la comunidad civil y los diferentes sectores sociales de esta ciudad y el departamento de El Paraíso, elevando de esta manera el perfil de una institución con historia en beneficio de la educación nacional.
Los docentes que estuvieron bajo su dirección reconocen, en ella tenía la capacidad de dirigir y conducir el personal en las diferentes áreas de la institución académica. Bajo esta premisa, Gamero, contó con la experiencia y capacidad de un selecto grupo de maestros con trayectoria en la docencia. Sin embargo, a partir de aquel momento comenzó un nuevo ciclo para todos bajo el nuevo liderazgo adquiriendo nuevas experiencias, bajo normas de disciplina.
A criterio de los docentes, desde que la licenciada Gamero, llegó a este espacio donde por 65 años fue la sede de la Escuela Normal España, no se detuvo a ver al pasado, habia terminado un ciclo de seis décadas y comenzaba otro en el devenir histórico de la educación. Una nueva era, donde Gamero puso alma, vida y corazón por mantener cada espacio, cada rincón, cada aula, oficina, jardines, potreros, tierras de cultivo, canchas y todo bien material, en óptimas condiciones. Este era el presente, el puente para pasar al futuro, que hoy las nuevas autoridades le deben dar seguimiento.
Mercedes Gamero, con ese espíritu visionario comprendió que siete años representan el número perfecto para entrar en una nueva senda. Nadie quería que se fuera. Y nadie mejor, que sea el personal que estuvo bajo su dirección quienes expresen con sano juicio y criterio, el trato cordial y sincero que brindó a cada miembro del personal docente, administrativo, de campo, de servicio y alumnado. “Con ella se trabaja bajo un clima agradable, de respeto, exigencia, pero con mayor compromiso profesional y de formación para estar a la altura y el nivel de preparación que la sociedad actual requiere”, indican en una breve semblanza sobre la trayectoria de Gamero.
En un mensaje dirigido a la licenciada Gamero, los docentes definieron como, “un día triste para nosotros, y quizás alegre para usted porque regresa a la Sede Central de la UPNFM. Hoy el personal a su cargo quiere manifestarle que usted es una excelente gestora, administradora, líder, una mujer ecuánime y proactiva, ponderada, cortés, amable, simpática, preparada, sociable, trabajadora, creativa e inteligente. Una mujer de altos quilates que ha demostrado ética y profesionalismo en su proceder de cada día. Una gestora incansable que ha establecido alianzas con muchas instituciones y personas de la zona, a fin de colaborar y apoyar en todo aquello que beneficie a la comunidad. Prueba de ello es que usted ha participado en diferentes actividades comunales como ser: vicepresidenta del Comité del Festival del Maíz, secretaria y vicepresidenta del Comité Cívico Interinstitucional de Danlí, vicepresidenta del Comité Danlidense de Desarrollo CODANDE, entre muchos otros cargos”.
Agregan en el mensaje de despedida: “Sabemos que toda persona en la vida se establece planes, proyectos, metas, sueños, anhelos, misiones, en otras palabras; toda persona experimenta ciclos, naturalmente diferentes según sea el caso. Quizás usted el día de hoy no está cerrando un ciclo, sino más bien cambiando la trayectoria de su vida.
Nos sentimos orgullosos de pertenecer al equipo de docentes que trabajamos junto a usted para alcanzar el éxito esperado en estos 7 años. Valoramos su profesionalismo, su ética, su honestidad y transparencia en el manejo de este centro regional.
No queremos despedirnos de usted sin antes decirle que todos la admiramos mucho por sus innumerables cualidades. Jamás olvidaremos su manera cordial de dirigirse a todas las personas, su sonrisa permanente en el trato, su capacidad de intuir, discernir y analizar a las personas, por su elegancia y porte en el andar, por su incasable deseo de preparación académica y por su habilidad de entablar alianzas con otras instituciones. Por esa y tantas otras cualidades y atributos que usted posee es que jamás la olvidaremos. Cuente con nosotros, con nuestra amistad si algún día nos necesita.
Concluimos el mensaje no con una despedida final; no le decimos adiós, sino un hasta luego. Las puertas de este centro regional y de nuestro corazón están abiertas para usted. Puede tocarlas y regresar cuando usted guste. Deseamos de corazón que Dios la bendiga y la acompañe en su regreso a Tegucigalpa. Estamos seguros que allá alcanzará más éxitos”.