El Aeropuerto Toncontín, ubicado en la capital hondureña, se encuentra parcialmente cerrado debido a una densa capa de humo que ha cubierto la ciudad de Tegucigalpa, producto de los incendios forestales que afectan sus alrededores.
El cierre temporal del aeropuerto se ha implementado como medida de precaución para evitar posibles accidentes aéreos, ya que la falta de visibilidad debido al humo representa un riesgo para las aeronaves que despegan y aterrizan en la pista.
De acuerdo con las autoridades aeroportuarias, en algunos momentos la visibilidad se reduce a tan solo 3 kilómetros, lo que obliga a cerrar la pista y altera el normal flujo de llegadas y salidas de vuelos.
Los incendios forestales registrados este año en Honduras han superado los dos mil, afectando más de 167 mil hectáreas de bosques, según informes oficiales. Específicamente en los alrededores de Tegucigalpa, en la región central del país, algunos incendios se han propagado rápidamente debido a los fuertes vientos.
La densa capa de humo ha reducido drásticamente la visibilidad en la capital hondureña, al punto de que apenas se distingue la silueta de los cerros que la rodean.
Mientras tanto, los otros tres aeropuertos internacionales del país, ubicados en San Pedro Sula, La Ceiba y la isla de Roatán, en el norte y el Caribe, continúan operando con normalidad.