Desarrollo con orden y legalidad

MA
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7 de enero de 2020
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08:40 am
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Desarrollo con orden y legalidad

Escrito por Francisco Rodolfo Jiménez Caballero

Los medios de comunicación del país dan a conocer dos posiciones ideológicas. La primera afirma que el poder que actualmente dirige el ciudadano, abogado Juan Orlando Hernández es el producto de elecciones fraudulentas y que por lo tanto, este debe renunciar al mismo, y que en su defecto el Poder Ejecutivo sea asumido por un grupo de ciudadanos de reconocida capacidad e idoneidad para dirigirlo y administrar el proceso electoral próximo para que su resultado tenga el producto libre, espontáneo y voluntario del electorado hondureño, y la segunda tesis manifiesta que el gobierno actual debe continuar en el ejercicio del poder, dirigir el proceso electoral próximo y entregar el poder en la fecha que establecen las leyes, a quienes resulten favorecidos con el voto del electorado expresado en las urnas. En el primer caso, el país tendría que elaborar una nueva constitución política producto del trabajo de una asamblea nacional constituyente que organizaría el estado, adaptándolo en todos sus aspectos a la situación mundial actual, que contempla el desarrollo económico, social, cultural y político de los pueblos que aspiran a mejores condiciones de vida, en todo sentido, como lo es nuestro pueblo y en el segundo caso, seguiríamos con la constitución actual introduciéndole las reformas necesarias para el logro del desarrollo nacional.

¿Qué opina usted, estimado lector, sujeto y objeto de este Estado que es Honduras? La respuesta corresponde a cada uno de los ciudadanos hondureños que conformamos este Estado. Internacionalmente se nos quiere inducir a los dos sistemas políticos que existen en la mayoría de los países: el comunismo o socialismo y el capitalismo. Existe un tercer grupo conformado por muchos elementos pensantes que consideran que este pueblo y los otros deben buscar y crear una tercera ruta, como lo deseara aquel ilustre patricio don Víctor Raúl Haya de la Torre, fundador de la Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA).

Los que participan en la primera tesis aspiran a fundar un nuevo modelo de Estado, que realmente sea beneficioso para todos los habitantes y los participantes de la segunda tesis estiman que con el estamento legal actual, mejorado se logren sus propósito y para ello están estimulando y promoviendo el surgimiento de nuevos entes partidarios y de corrientes que formen parte de los mismos; sin embargo hemos observado que no han dado a conocer los problemas del país y la solución adecuada de los mismos dentro de un clima de libertad y orden que nos conduzca al auténtico y verdadero desarrollo. Todos estos partidos políticos y movimientos internos de los mismos deben dar a conocer su programa de gobierno nacional, departamental, regional y municipal y la solución de cada uno de los mismos; en primer lugar, el problema agrario, que asegure, en la utilización y aprovechamiento del elemento tierra, bosque y todos los otros recursos, haciendo que la misma cumpla con su función económica y social; posteriormente como consecuencia de la ejecución correcta aplicada a nuestro medio, el desarrollo de la pequeña y mediana y gran empresa, en ambos proyectos, se crearían las condiciones para que los miles de desempleados actuales y los que provengan en lo sucesivo tengan oportunidades de trabajo compatibles con la formación de cada uno y entre todos, basados en el principio de la solidaridad, a través de las cooperativas, empresas asociativas y muchos medios más, crear, lograr y mantener el desarrollo del país.

Justos en el orden social y eternos en la justicia.

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