Pescador al que creían muerto llega a su velorio. En la zona del cayo South Cay, localizada en el litoral del departamento de Gracias a Dios, un pastor evangélico que había sido dado por muerto el pasado 3 de noviembre, apareció en los preparativos de su propio velorio, en medio del asombro de sus amistades en la aldea Kaukira.
Los actos fúnebres se comenzaban a realizar debido a que la familia y los locales daban por muerto a Itón Castellón, quien sufrió los embates de alta mar con el paso del huracán “Eta”, junto a otro grupo de pescadores que lo creían fallecido.
Cuando la familia se dispuso a ir por los restos mortales del supuesto difunto a bordo de una lancha, el asombro y la incredulidad se apoderó de los nativos, debido a que Castellón llegó al lugar, entre los preparativos de su velorio. Muchas personas comenzaron a aplaudir, considerando el hecho como un milagro.
¡GLORIA A DIOS, ESTÁ VIVO!
Según los relatos del mismo Castellón, sus compañeros creyeron que él había muerto de un paro cardíaco, pero solo se encontraba aturdido y había caído en un profundo desmayo, por las secuelas del paso de la depresión tropical.
Al ver con vida al pastor, varios de los amigos y familiares dijeron que se trataba de un milagro, debido a que, por la falta de comunicación en la zona, los pescadores no se dieron cuenta del paso del huracán “Eta”, que luego se degradó a depresión tropical en su paso por Honduras, situación que alteró sobremanera los oleajes en el Caribe y la costa norte.
El sobreviviente de la devastadora depresión tropical, al llegar, no podía ni hablar debido a la aterradora experiencia que vivió en alta mar.
“¡Gloria a Dios, está vivo!”, manifestaban con gran asombro varios de los oriundos de La Mosquitia, quienes ya se encontraban listos para sepultar al pescador.
El aventurero pastor, quien hoy se encuentra junto a su familia, se trasladó desde principios de la pandemia del coronavirus a la zona de La Mosquitia, para evitar resultar afectado por el mortal virus respiratorio.
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