Ever Velásquez, candidato a diputado por FM: “No quiero un voto por lástima”

ZV
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23 de octubre de 2021
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01:12 am
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Ever Velásquez, candidato a diputado por FM: “No quiero un voto por lástima”

Con estigmas, como: ‘allá va el bombero quemado’, sin novia (probablemente, por su cara desfigurada), sin posibilidades de nuevas cirugías y al borde del despido de su trabajo en el Cuerpo de Bomberos de Honduras, son las “secuelas” que apagan la vida de Ever Velásquez, el bombero símbolo de la lucha contra los incendios forestales en Honduras.

Cuatro años después del fatídico accidente, un 25 de abril, en una difícil lucha por sobrevivir, dice que le incumplieron todas las promesas que le hicieron cuando estuvo al borde de la muerte, con el cuerpo quemado, comenzando por un tratamiento digno. Son precisamente esos malos tratos y otras injusticias del país su motivación para querer convertirse en diputado.

A eso se le añade que, por la institución y sus compañeros, desea una curul, para que no vuelvan a poner en riesgo su vida como él, por falta de equipo apropiado para enfrentar los incendios forestales. Corre en la casilla 187 en la papeleta de Francisco Morazán, por el Partido UD y pide el apoyo de la gente pero que se lo den por convicción no por lástima, aclara, porque de eso ya está cansado de tanto que se lo dicen en todos lados.

¿Cómo va la campaña?
Pues, hasta el momento todo bien, gracias a Dios, he tenido una buena aceptación por parte de las personas aquí en Francisco morazán.

¿Ya recorrió los barrios, colonias y municipios?
No del todo, estamos tratando de apostarle más a las redes sociales por la situación del COVID-19, evitando el riesgo para mí y las demás personas, pero estas semanas me toca salir a algunos municipios.

¿Solo o en grupo?
Por ahora, solo, pero en las fechas finales de la campaña nos vamos a organizar para salir en grupo.

¿Alguna grosería en las redes?
La mayoría de comentarios son positivos, reconocen que el propósito mío es ayudar a los bomberos y al medio ambiente, aunque siempre hay personas que no creen en los políticos, pero son pocos, la verdad.

—Ofensas, apodos, discriminación, ¿qué le dicen?
Algunos comentarios diciendo que me estoy haciendo la víctima de mi accidente y no es así, pero, bueno, hay que aprender a lidiar con eso.

¿Y su familia?
Con temores por las muertes de personas que luchan por el medio ambiente pero siempre apoyan mis decisiones.

¿Cómo le surgió la idea de la política?
Por un amigo, cuando regresé de México platicamos sobre las necesidades de la institución y me dijo que conocía a personas del partido, al inicio no lo tomé con seriedad porque estaba ilusionado por todas las promesas que me hicieron de finalizar el tratamiento de mis cirugías, la vivienda, mejoramiento salarial y todo eso que no se ha dado. Después de vivir todo eso, incluso, hablan hasta de correrme, eso me hizo pensar que desde la política puedo generar cambios.

¿Quiénes lo quieren correr?
Es que yo publiqué en los medios que no se ha cumplido lo que me prometieron y por eso hablaron de correrme, querían que me quedara callado. Eso me ha dolido porque ellos no entienden mi situación, no están quemados, pero para mí es muy difícil levantarme todos los días, verme a la cara al espejo… y lo peor es que existe la posibilidad de poder mejorar, me lo prometieron, me generaron una ilusión.

–Pero, ¿quiénes son ellos?
A mí me prometió el Gobierno y también las autoridades de la institución para la cual laboro, pues, fue un accidente laboral por no contar con el equipo adecuado y por la mala toma de decisiones dentro del incendio; entonces, no es justo que ahora me quieran correr por pedir lo que me prometieron.

¿O porque anda en política?
No tiene nada que ver con la política, todo nació a raíz de ese reportaje que hice, lo que querían era que me quedara callado y que no revolviera más el avispero, pero es una injusticia y no puedo quedarme callado; o sea, soy yo el que estoy quemado y solo yo sé cómo vivo y por qué estoy pidiendo las cirugías.

¿Sigue escuchando que lo van a correr?
Por ahora, no, pero todo puede pasar pasando este año.

¿Cuánto gana como bombero?
18 mil, pero con las deducciones me quedan 15 mil.

¿Cuánto le cuestan esas cirugías?
No tengo el precio exacto, depende de qué tan difícil sea el procedimiento, pero el doctor debe evaluarme primero.

¿Ya las tiene programadas?
El doctor Cherenfant me había comenzado a tratar y me hizo una una pequeña incisión, pero después no sé cuál era el juego, porque, primero, me dijeron que lo buscara por la Clínica San Jorge, donde me realizó una pequeña cirugía; de ahí, era otro procedimiento más, porque no quedó como yo quería; entonces, me dijeron que lo buscara por el Seguro Social, pero cuando accedí a él, me dice que se va a retirar del Seguro y que mejor lo vuelva a buscar por la San Jorge.

¿Y cuánto le cobró?
48 mil lempiras, pero eso lo pagó la institución.

¿Ha buscado otro doctor?
A varios más, pero me explican que este proceso no es de cirugía plástica, sino de microcirugía y aquí en el país yo no he podido encontrar a alguien especialista en esta área.

¿Y en México?
Me contacté con la doctora Lourdes, que me trató durante todo el proceso, y me recomendó al Dr. Reynaldo Reynoso, que es un microcirujano especialista en México, pero no puedo comunicarme con él por la distancia a menos que la institución me ayude con la gestión y así salir de la duda si es posible o no mejorar, es lo que yo estoy pidiendo.

¿Sigue siendo bombero de campo o pasa en la oficina?
Siempre sigo cumpliendo con la misma función que tenía antes de quemarme.

–Cuando se mira al espejo, ¿se arrepiente haber entrado?
No me arrepiento de la decisión de ser bombero, pero cuando me veo al espejo, sí. Como ser humano me siento mal, no es fácil digerir a temprana edad, tenía 21 años, este cambio radical. Hoy en día, a mis 25 años, sigo lidiando con muchas cosas.

¿Como cuáles?
Bueno, yo no suelo comer en público porque, por el problema que tengo en la boca, a veces la comida se me cae, no puedo tomar sopa delante de la gente porque a mí se me cae por un lado de la boca, entonces, a muchas personas les causa asco, pero no es culpa mía.

¿Han mejorado sus movimientos físicos?
Ya son casi 3 años y no he podido lograr ninguna mejora en ese aspecto porque no me ha realizado las cirugías. Por lo demás, he recuperado prácticamente al 100% de la movilidad de todas mis extremidades.

¿Casado?
No.

¿Hijos?
Tampoco.

¿Novia?
No.

–¿Tendrá que ver su rostro?
Es un tema bastante difícil porque hay que aceptar la realidad, vivimos bastante de la apariencia, no es fácil aceptar a una persona con un rostro así. Tuve una novia después de las quemadas, pero nos dejamos.

¿Por su apariencia?
No, por los caracteres de ambos, pero le guardo mucho cariño por aceptarme quemado.

¿Le incomoda que le tengan lástima?
Eso sí, porque sigo siendo Ever Velásquez y tengo la fortaleza para poder seguir valiéndome por mí mismo y lograr lo que me proponga en la vida. Yo quiero ser diputado para seguir sirviendo, pero quiero que voten por mi propuesta, no quiero un voto por lástima.

¿Qué le dicen en la calle?
A veces, cuando paso por el mercado o centros comerciales, las personas siempre susurran de una manera fuerte ‘va el quemado, pobrecito, mirá cómo le cambió la cara’ y comentarios así de todos los días que es difícil lidiar con ellos.

¿Ha superado el trauma del incendio?
Es complicado porque todos los días que me levanto me veo al espejo y recuerdo el porqué estoy quemado, he vivido muchos días de pesadilla recordando a los compañeros que nos estábamos quemando vivos y los gritos, que no eran gritos cualquiera.

¿Recuerda algún detalle o un movimiento que lo salvó de morir quemado?
Siempre digo que Dios me salvó, pero en la desesperación, los cinco compañeros tomamos rumbos distintos, después de permanecer casi un minuto en el fuego, abrí los ojos y logré saltar fuera de las llamas en un lugar donde no se había quemado y, como instinto, me quité las pocas prendas del uniforme que aún estaban encendidas, llegué solamente en bóxer y calcetín al hospital, puede ser que esa acción haya ayudado para que no me quemara del todo.

¿Y sus compañeros?
Como tomamos rumbos diferentes, no supe de ellos, dos se quemaron ahí y los otros dos murieron estando en México durante el proceso.

¿Cuánto se quemó?
Tengo todo el cuerpo quemado, excepto los genitales.

¿Cuál es su consejo para quienes quieren ser bomberos?
Que no se desanimen, mi caso son circunstancias de la vida no necesariamente les va a pasar a ellos, al final, lo importante es poder servir a la comunidad.

¿Ha pensado salirse de los bomberos?
Con todas estas situaciones, lo he pensado y tendría que renunciar si salgo diputado porque no puedo tener dos salarios, pero mi meta es siempre continuar como voluntario.

¿Por qué escogió el Partido UD?
Porque fue el único que me abrió las puertas.

¿Cómo está la situación de los bomberos actualmente?
Con muchas falencias, con 300 overoles para incendios y somos tres mil en la institución, estas cosas quizás no las quieren decir porque ahora todo es política y tienen miedo de ser corridos de sus puestos, pero para mí es injusto. Imaginese, ahoria lo de Guanaja y ni estación de bomberos hay. Tres mil bomberos para 9 millones de personas. No puede ser. Y muchos de ellos solo con contratos.

–Tampoco bajan los incendios, ¿por qué será?
El 70 por ciento de los incendios son provocados por los humanos, pero a nadie se le aplica la ley porque no tenemos gente que se dedica a la investigación de incendios forestales o que investigue como tal este delito.

–Y todos los años se quema el mismo lugar, ¿se ha fijado?
Pues sí, nadie investiga, porque cuidadar el ambiente es riesgoso, desde el 2009 hasta la fecha más de 120 ambientalistas han fallecido.

–La gente se queja que llegan tarde, ¿a qué se debe?
Por todo el protocolo del 911. Antes, se llamaba directamente a la estación más cercana y esta inmediatamente se desplazaba, pero ahora, como estamos dentro del sistema, se pierden minutos vitales en un incendio. No es culpa de nadie, es solo el protocolo.

–¿Sigue estudiando?
Estoy con un diplomado de adaptación al cambio climático con la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH). Luego pienso estudiar Derecho.

–¿Vive con sus padres?
No, alquilo un cuarto, mis padres viven en Jesús de Otoro, soy hijo único.

 

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