“YA NO LOS HACEN ASÍ…”

MA
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29 de noviembre de 2022
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12:25 am
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“YA NO LOS HACEN ASÍ…”

¿QUÉ es “metanoia”?, –lo busqué en el diccionario y no lo encontré, lee una de las consultas– el concepto utilizado en el editorial. En teología es un cambio de dirección –una conversión positiva en que la persona accede a una revelación divina– o de sentido. En psicología se utiliza como la transformación de la psiquis que persigue la autocuración”. El escrito sugiere que la vida de Plutarco, su ejemplo de conducta, es paradigma de imitación de una sociedad en decadencia –desprovista de los valores preciosos que forman, educan, cincelan la valía del individuo, modelan el carácter– y remontar del deterioro que sufre. Ahora una muestra de los mensajes recibidos: “Conocí a Pluto –cuenta una amiga– cuando estaba yo en 5to grado de primaria en María Auxiliadora y era compañera de su hermana María Luisa”. “Como vivíamos en el Country, pasaba recogiendo a todos los Castellanos para ir al colegio”. “Primero a Pluto en el San Miguel, por el parque Colón, después a María del Carmen que daba clases en una escuela en el barrio El Jazmín y el resto de sus hermanas, y mi hermana y yo, ya directo al colegio”. “Cuando regresé a Honduras, ya Pluto era una eminencia, pero siempre el mismo: bueno, amable y humilde”. “La gran persona que siempre fue”. “No puedo evitar recordar esos años, que tampoco lo cambiaron, cuando fue ministro”. “Si lo lloro”.

Otro lector: “Qué hermosura de tributo, digno de la estatura de su amigo”. “Qué pesar”. “Me decía un doctor de Viera: “my role model”, (mi modelo a seguir); “hey, don’t make them like they used to”, (ya no los hacen así, como los hacían antes)”. Un mensaje de La Ceiba: “Acudimos a inaugurar aquí un pequeño hospital de su hijo y otro socio colega de mi esposo, y su calidad humana se refleja en su familia”. “El doctor perdurará en el recuerdo, como esa suave luz de mejoría cuando se estaba en sus cuidados”. “Tenemos ángeles, que estoy segura nos acompañan siempre”. Un fundador del colectivo: “El sentimiento de la pérdida de un amigo tan especial hace que tengamos un acto de contrición profundo”. “Hoy en su editorial logró plasmar en letras maravillosas todo lo que sentimos los que durante años estuvimos cerca del doctor Plutarco Castellanos”. Otro lector: “Lindo escrito memorial para su amigo a quien conozco y trate a sus hijos en el instituto San Miguel.” “Es honroso ver con que sentimiento escribe el reconocimiento a la vida de un amigo”. Otro fundador del colectivo: “Lindas palabras para despedir al querido doctor Castellanos”. “Ciertamente un ejemplo de vida, un referente en el gremio y la sociedad de persona honesta y sensible a las necesidades y tribulaciones de los pacientes y amigos”. “Lleno de sensibilidad humana y valores que ahora son “cosa del pasado” y tienen nuestro tejido social en franca decadencia”. “Siempre será una luz que guíe al Hospital María, monumento de esperanza para miles de niños necesitados que construyeron junto a doña Mary”. “El martes en Junta Directiva cerró la sesión dando una cátedra de por qué la directiva del HMEP debía continuar luchando por la defensa del modelo de atención a los niños y especialidades críticas como la cardiología”.

Otro comentario: “Que reconocimiento tan sincero, fruto de un alma adolorida”. “Despedida para el amigo entrañable, para el ciudadano correcto”. “Excelente salutación en honor a la memoria de un hombre bueno, honesto y capaz”. “Un digno profesional que en el ejercicio de su noble apostolado nos deja marcadas huellas que recorrer”. “Le conocí la nobleza de su corazón y la sabiduría de sus conocimientos”. “Fue mi médico personal durante mi vida y en estos últimos tramos de ella”. “Un gran conversador, a lo mejor para darle confianza a sus pacientes”. Un último mensaje: “La tristeza invade a mi familia; don Pluto fue el médico de cabecera de mis abuelos y de mi papá”. “Con mi papá los unió una gran amistad desde jóvenes, y él fue mi médico desde mis 7 años”. ”Increíble que aún tuviese mi expediente desde la primera vez que me vio como médico”. “La lección que él me deja, es que el amor y la misericordia, es recompensada por Dios en bendiciones; no solo a quien hace el bien, sino a toda la familia, y eso fue lo que él heredó a su familia la bendición de Dios”. “Mis condolencias para usted, sabiendo que no solo ha perdido su médico, sino a su amigo cercano y que tomará su tiempo –emocionalmente– dejarlo ir”. “Descanse en paz”. (Es la vida un camino, –Winston, de Calderón de la Barca– que al nacer empezamos y al vivir proseguimos, y aun no tiene su fin cuando morimos”).

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