Guido Croxatto, jurista argentino: “Está de moda ‘el derecho penal del enemigo”

El abogado de Pedro Castillo, el expresidente peruano que terminó preso por intentar disolver el Congreso, conversa en exclusiva con Día 7 sobre los desafíos del Estado de Derecho en la región, aprovechando una visita a Honduras para disertar sobre estos temas. El caso de su cliente, dice, es un ejemplo del debate jurídico, pues, el único delito es ser maestro rural y usar sombrero. Un pecado, agrega, que no perdonan los de arriba y parte de la justicia conservadora de la región que se ensaña con líderes políticos progresistas. Para sus detractores, acepta, este caso no es más que otro de los tantos de la América Latina del realismo mágico de García Márquez donde cualquiera es presidente, se presentan como mansas palomas y terminan como dictadores, locos, suicidas o presos. Como sea, Guido Croxatto aboga, en esta entrevista, por recuperar la filosofía del derecho, esto eso, defender los ideales de la justicia por encima de las ideas de izquierda o de derecha. Ni Boca ni River, pero sí peronista, comienza aclarando.

–¿Viene de la barriada argentina?
No, de un barrio acomodado, Recoleta y fui a un colegio privado del que salieron muchos políticos famosos de Argentina.

–¿Tenía alguna referencia de Honduras?
Yo viví mucho tiempo en un apartamento en Palermo, precisamente, sobre la calle Honduras, donde están las otras calles con el nombre de los países de Centroamérica. Entonces, cuando yo decía en Argetina estoy en Honduras, quería decir que estaba en mi casa, pero ahora estoy de verdad en Honduras.

–¿Como todo porteño, me imagino que tiene el gusto por el asado, mate, peronista y Boca?
Todo es cierto, solo que practiqué más el Rugby y soy hincha de Racing, como casi todos los peronistas.

–¿Cree que la abogacía sigue siendo respetada en la región?
Las carreras de abogacía en América Latina, son cada vez más pobres, hace 200 años el abogado era un hombre culto, de letras. Hoy, la imagen es de iletrados, ignorantes y hasta vagos, preocupados más por sus honorarios que por defender algun ideal de justicia.

–¿Mercantilizados?
Como todos los saberes, y cuando son jueces o fiscales, sus intervenciones son mediocres sin ninguna elegancia intelectual, lenguaje jurídico pobre, no hablan como abogado. Creo que el mercado ha cambiado la filosofía del Derecho. A alguien le sirve que los abogados, cada día, seamos ignorantes, hay que volver a humanizar esta profesión.

–¿A qué viene a Honduras?
Fui invitado a intercambiar ideas entre la academia de abogados de Honduras y la Argentina, pero también le traje al expresidete Zelaya y su esposa una carta de Pedro Castillo, porque ellos fueron los primeros que se solidarizaron con la destitución de manera inconstitucional de Castillo.

–¿En qué instancia está el caso del expresidente Castillo?
Castillo está en prisión preventiva, sin condena, hace más de un año. No han encontrado ninguna prueba en su contra, han inventado acusaciones, pero todas se han ido cayendo. La fiscal de la nación, que inició la persecusión penal, ahora, está destituida y acusada de liderar una organización criminal por el mismo golpismo.

–¿Cuál es el argumento de la defensa?
Que es el primer presidente destituido de manera inconstitucional, violando tres artículos de la Constitución y uno del reglamento del Congreso y por consiguiente la vacancia es nula.

–¿Tenía facultades Castillo para cerrar el Congreso?
Eso es lo que están discutiendo los constitucionalistas, pero supongamos que no reunía todas las condiciones, la Constitución establece que tenían que hacerle un juicio por infracción constitucional, pero lo hicieron por incapacidad inmoral, un procedimiento que han usado los legisladores del fujimorismo para extorsionar a los presidentes y negociar. Castillo nunca quiso negociar con ellos, ni renovar las concesiones mineras del fujimorismo, por eso lo querían destituir.

–¿Incidió que sea de extracción humilde y sombrerudo?
Está muy bien esa pregunta porque Castillo poco a poco se fue aculturizando, lo primero que hicieron fue impedirle usar su sombrero chotano, le decían cholo, que olía mal, que tenía que vestirse de otra manera, y que cambiara su forma de hablar y por último su forma de gobernar. No lo dejaron ser quien era, por eso, los indios, aunque no tengan formación jurídica, saben que hay racismo y una injusticia contra Castillo, hay mucho rencor en Perú, por eso.

–¿Cuál ha sido la consencuencia?
Hay 70 personas asesinadas, impunes; Fujimori fue indultado violando el sistema interamericano. Castillo se oponía a indultarlo y le ganó las elecciones a su hija, Keiko Fujimori. Hoy, la realidad nos muestra una paradoja: Castillo preso y Fujimori libre.

–¿Le advirtieron que estaba loco por tomar un caso de semejantes caractarísticas?
Fíjate que sí, la verdad que muchos amigos me dijeron que arriesgaba mi prestigio académico defendiendo a Castillo, pero en realidad estoy aplicando lo que aprendí: Aplicar el derecho, el abogado tiene que actuar con firmeza y si se cometió una injusticia, por más que la opinión pública no lo vea así, uno tiene que comprometerse con la causa.

–Fujimori, Toledo, García, PPK y ahora Castillo ¿Por qué todos los presidentes de Perú terminan mal?
Mi maestro y compañero de la defensa, Eugenio Zaffaroni, un penalista respetado en América Latina, entiende que el sistema jurídico peruano- una mezcla de parlamentarismo -presidencialismo- hace ingobernable al país. No hay un equilibro entre los poderes, hace falta una reforma política, el Congreso es el verdadero poder en el país, no el gobierno.

–Cada abogado tiene una opinión diferente sobre el mismo caso ¿Tendrá que ver cuestiones ideológicas y políticas?
Creo que el derecho está en una crisis en América Latina. Defender el debido proceso no es de derecha ni de izquierda y si se han violado normas en el caso de Castillo, todos los abogados tenemos que decirlo, no temenos que callar por miedo o comodidad, si nosotros no alzamos la voz, esa crisis seguirá aumentando.

–¿Cómo se comportan los tribunales en estos casos?
Hay un problema común en América Latina, los tribunales de justicia desde México hasta la Patogonia, actúan con un sentido de activismo conservador. Lo vimos con Lula, Correa, Evo, Lugo, Zelaya, ahora Petro, y los abogados tenemos que analizar mejor estos fenómenos si queremos consolidar la democracia.

–¿Cómo le está yendo a su país con Milei?
Muy mal, la pobreza aumentó en 20 por ciento en solo dos meses, es una persona desprolija, mal educado, insulta a todos los gobernadores no importa si son de izquierda o de derecha, hoy está peleado con todo mundo, no está a la altura del cargo.

–¿Están, los argentinos, asistiendo al entierro del kircnerismo y peronismo?
No lo creo, siempre los dan por terminado, pero luego regresa, como sucedió después del triunfo de Macri.

–¿Va ir presa Cristina Fernández?
Ese es un caso elocuente de persecución judicial, hace un año la quisieron matar, la jueza que tiene la causa no hace nada por investigar ese atentado, se le han inventado un montón de causas, pero es parte de la persucución judicial contra los líderes progresistas. Hay una paradoja en América Latina: A todos los que luchan por la soberanía nacional casi siempre los acusan o no los dejan gobernar, pero a quienes regalan nuestros recursos se les aplaude.

–¿Cuáles son los desafíos del estado de derecho en América Latina?
Creo que el principal desafío es no erosionar la democracia ni las garantías procesales. Está de moda “el derecho penal del enemigo”, una doctrina que nace en Alemania, pero que se aplica aquí. Casi todos los principios del derecho de la modernidad estan invertidos: la presunción de inocencia, la pena como sulución, la prisión preventiva como excepción y no de oficio, la mínima intervención penal, el principio de proporción de la pena.

–¿Están politizados los sistemas judiciales?
Esa es la mayor amenaza, pero quiero advetir que no siempre se entiende debidamente, es decir, que los políticos influyen en la justicia, creo que el riesgo es mayor, que no vemos: Es que los jueces criminalizan a los políticos por intereses económicos que nisiquiera son nacionales.

–¿Cómo valora el rol de la fiscalía?
Creo que las fiscalías están politizadas en toda América Latina, pero lo que vemos es un activismos judicial conservador, no un activismo judicial progresista; jueces y fiscales se alejan del derecho, persiguen a líderes políticos en base a ideas políticas y no con argumentos jurídicos.

ÉL ES…
Guido Leonardo Croxatto nació en Buenos Aires, Argentina, el 23 de noviembre de 1982. Estudió derecho con orientación penal y posteriormente hizo estudios de Filosofía del derecho en la Universidad de Buenos Aires y en Alemania. Es conferencista internacional sobre los desafíos del estado de derecho y actualmente integra la defensa del ex presidente peruano, Pedro Castillo.