En un momento de inseguridad, alejado como equipo de la versión que propuso en el primer trimestre del curso, Luis Suárez y Jan Oblak son unos recursos incalculables, cuya dimensión cobra una transcendencia indispensable para el Atlético de Madrid ganador contra el Alavés por el goleador uruguayo, certero en un cabezazo, y por el portero esloveno, salvador de penalti (1-0).