Delito de Concusión al expresidente Marco Aurelio Soto (1885/1886).

ZV/27 de April de 2024/12:43 a.m.

Juan Manuel Aguilar Flores

He buscado más datos sobre el titular de este corto trabajo histórico, escasas referencias. Las pesquisas encontradas en el Archivo Nacional de Honduras son las que expongo: “…en que se manda crear un Comité de Investigación sobre los actos que se atribuyen al expresidente Dr. Soto. Considerando que la opinión pública de dentro y fuera del país denunció al expresidente Sr. Marco Aurelio Soto, como autor de los delitos de concusión y depilación de caudales nacionales durante el tiempo que ejerció el poder ejecutivo; y que es un deber de la autoridad, procurar el esclarecimiento de tales hechos para salvar los derechos de la nación. 5 de mayo 1885” (1). En legajo de en 1885, carpeta No. 3, expresa: “…sigue formándose comisiones para enfrentar al Dr. Marco Aurelio Soto en lo que acusa concusión y dilapidación de caudales nacionales…” (2). Existe nota de la secretaria de Relaciones Exteriores de Guatemala, enviada en 1886 al ministro de Honduras: “Sr. ministro: Tengo el honor de comunicar a V. E: que se ha dado el curso correspondiente al suplicatorio que para proceder al embargo provisional de los bienes que en esta ciudad posee el expresidente don Marco Aurelio Soto, dirige (sic) el juez 1° de letras de esta capital, al 1° de Justicia de este Departamento y que V. E. se sirvió emitir con nota del 12 del corriente. Soy de V. E. con muestras del mayor aprecio y distinguida consideración muy atentamente su seguro servidor. Antonio Lazo Arriaga (3). Teniendo en cuenta que Soto abandonó el país, con el beneplácito del Consejo de Ministros 5 de mayo 1883, se le encomendó -con gastos de representación 10,000 libras esterlinas- hacer encargos en Norteamérica y Europa en beneficio del país. No viajó a Inglaterra, a solventar la deuda federal. Se quedó en San Francisco, aquí, estuvo al tanto de lo que ocurría en Honduras y en los países vecinos. Conociendo las divergencias políticas entre Soto con el presidente de Guatemala Gral. Justo Rufino Barrios, ratificó su renuncia, siendo enviado por medio de don Joaquín Estrada Palma y Julio Lozano para ser entregada al Gral. Enrique Gutiérrez, encontrándose este muy enfermo falleciendo el día que llegaban a Tegucigalpa. La renuncia no fue entregada y devuelta a Soto, quien la remitió nuevamente por medio de Sr. Mariano Soto, y conocida el 17 de octubre 1883. Soto devolvió los gastos de representación (4). Teniendo la fecha en que se le otorgó permiso de retirarse del país a la fecha en que es acusado por decreto, habían transcurrido un año, once meses y veintiséis días. Estando Soto fuera del país, Cáceres Lara anotó: “Agentes del Gral. Barrios, unidos a enemigos de Soto que habían aparecido en abundancia en Honduras, recorrían este país levantando opinión en contra del regreso de Soto y en favor de que se produjera un movimiento de insurrección si tal hecho se efectuaba. La obra subversiva cobraba fuerza…por la debilidad del gobierno de ministros para reprimirla y también por el juego político del Gral. Bográn, por otra parte” (5). Soto no regresó al país, consideró: “…no vale la pena que se derrame una gota de sangre…” (6). No vuelve a mencionarse la dicha acusación contra Soto. A instancias de algunos amigos en 1902, presentó candidatura a la presidencia del país, obtuvo escasos votos y el mismo año como inversionista solicitó concesión para instalar un ferrocarril del sistema Decauville (figura tomado de Wikipedia) que recorrería Trujillo, Laguna de Guaymoreto hasta Olanchito (7). Lo anterior fue uno de los tantos juegos políticos para desprestigiar a determinado funcionario público no estando este en el país.

Notas
(1)-Gaceta Oficial de Honduras. Teg. 5 de mayo 1885. No. 307. Pág. 4. Col. 1. Decreto No. 32.
(2)-Legajo Año 1885 (3). Concusión a Marco A. Soto. Archivo Nacional de Honduras. (ANH).
(3)-Página membretada. Secretaria Relaciones Exteriores de Guatemala. 20 de marzo 1886. Nota enviada al ministro de Honduras. ANH.
(4)-Cáceres Lara, Víctor “Gobernantes de Honduras. Siglo 19. Teg. 1978. Edissof. Págs. 235/285.
(5/6)-Ídem. Pág. 279
(7)-Oquelí, Ramón. Revista Universitaria. Teg. Julio 1992. No. 28. Etapa VII. Pág. 109.
Glosario.