Por Carlos Medrano
Periodista
Los hondureños somos proclives a no reconocer los triunfos o éxitos de otros, somos muchas veces mezquinos y tendemos a realizar una visceral critica a todo lo que viene del gobierno y sus políticas públicas, porque consideramos que es sinónimo de corrupción y malos manejos.
Por ejemplo, una de las decisiones de buen gobierno que no me canso de alabar de esta administración fue cuando trasladó la compra de medicamentos a un organismo internacional llamado UNOPSS, que terminó, más bien disminuyó, la galopante corrupción alrededor de la venta de medicamentos en el Ministerio de Salud.
Otra medida positiva fue como trasladar la gran cartera de proyectos de infraestructura que manejaba Insep, a el organismo llamado Invest, que ha disminuido la enorme corrupción que se movía en las oscuras oficinas de este elefante blanco administrador de las carreteras del país, el activo más grande que tiene Honduras.
Pero hoy quiero reconocer algunas medidas de política monetaria implementada por el Banco Central de Honduras, BCH, que me parecen importantes y que han traído resultados históricos y dignos de reconocimiento.
El presidente de COHEP, Ing. Juan Carlos Sikaffy, en su reciente discurso de reelección, consideró que los indicadores macroeconómicos han mejorado, generando un impacto positivo en la calificación de riesgo país y que nos encamina a ser la tercera economía más grande de Centroamérica, solo por debajo de Guatemala y Costa Rica.
Cuando organismos internacionales, en este caso, calificadores de riesgo han mejorado nuestros cuadros, eso tiene un impacto directo en la inversión extranjera, que es lo primero que investiga al considerar una posible inversión en un país como los nuestros.
Las políticas macroeconómicas del actual gobierno, han permitido que las tasas de interés en moneda nacional hayan disminuido considerablemente, además de una reducción de la dolarización de los depósitos en el sistema financiero, lo que evidencia la confianza en nuestra moneda.
Esta medida determinada por la entidad rectora de la política monetaria, crediticia y cambiaria significará que a finales del primer trimestre se tendrá mayor colocación o demanda de recursos de los distintos sectores productivos del país.
El bajar las tasas de interés bancario, en el pasado leoninas, desproporcionadas e inalcanzables para los sectores productivos, tiene un impacto positivo en toda la economía, ya que muchos empresarios, industriales y comerciantes, aceleran sus inversiones al tener más acceso al dinero.
Para nadie es desconocido que casi todos los hombres de negocios, por mucho capital que posean, su operación y expansión económica la trabajan con la banca nacional, y al tener mejores tasas de interés, sus utilidades aumentan y por ende, las posibilidades de una expansión de sus operaciones es alta.
Esperamos que las políticas macroeconómicas implementadas por el Banco Central de Honduras, BCH, se trasladen a la microeconomía, ya que el pueblo hondureño urge de trabajo y comida, indispensables para mantener una sociedad en paz social.
carlosmedrano1@yahoo.com
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Política macroeconómica ha generado resultados positivos