Por Óscar Lanza Rosales
olanza15@hotmail.com
Queridos lectores, con el atento saludo, les informo que ante la pandemia apocalíptica que nos azota, he tomado la decisión de salir ocasionalmente de mi año sabático, para informarles las mejores acciones que según mi criterio, se están realizando en el mundo para combatir este virus.
Creo que este virus ha movilizado a toda la humanidad para hacerle frente a la crisis, excepto algunos gobernantes como Trump de Estados Unidos, Bolsonaro de Brasil, Johnson del Reino Unido y López Obrador de México, que se han mostrado medio indiferentes ante la grave situación.
Hasta la fecha hemos podido apreciar que países y ciudades han tenido, pobres o excelentes desempeños en sus campañas contra el coronavirus, sobresaliendo en estos últimos los que comenzaron en forma temprana, y con estrategias bien pensadas para combatirlo.
Lamentamos lo que ha pasado en Francia, España, Ecuador y otros países, cuyas medidas, probablemente tardías, no les han funcionado. Y dato curioso, a nivel de ciudades, las que han sido polos de desarrollo económico, como Milán, Sao Paulo, Guayaquil y hasta nuestra ciudad insigne, San Pedro Sula, ha caído de manera despiadada en las garras de esta peste.
Sin embargo, hay países como Singapur, Corea del Sur, Taiwán, Japón y Alemania, que han hecho un trabajo impecable, cada uno con su propia estrategia, que desde que se mencionó este virus agresivo, no se cruzaron de brazos, sino que de inmediato actuaron, con gran determinación y creatividad, siguiendo el enfoque, que a juicio de su gobierno, era el más eficaz. Sobre esto quiero escribirles en este artículo, sobre algunas de estas buenas experiencias, para que nos sirva a los hondureños de lección, y nos ayude a salir de esta tempestad.
Singapur, al igual que los demás países, ha cerrado la mayoría de los centros de trabajo, excepto los esenciales y los sectores económicos claves, como la construcción de obras y los astilleros. Se fomenta el trabajo desde la casa. Se han cerrado las escuelas, colegios y universidades, pero se han preocupado por poner en práctica un verdadero proceso de aprendizaje en el hogar. Le piden a su gente a quedarse en casa tanto como sea posible. Evitar socializar con otros más allá de su propio hogar. Le exige a sus pobladores higiene total, de su persona, casa y alrededores. Hay un dato importante, todos los habitantes se toman la temperatura dos veces al día. Tienen un manual completo para evitar el coronavirus. La gran novedad, es que dentro del personal de salud, han incorporado a los rastreadores de contacto o personal de inteligencia, que se encarga de ubicar a todas las personas con las cuales una persona que ha dado positivo, ha tenido contacto, para hacerles el test de COVID-19.
El presidente se comunica con sus conciudadanos cada semana. Y en su última comparecencia les agradeció a todos, sus esfuerzos y sacrificios, invitándolos a unirse en primera línea, para combatir el virus. Sus palabras finales fueron: “Será una larga pelea. Pero si algún país puede hacer esto, es Singapur. Tenemos los recursos, la determinación y estamos unidos. Al ayudarnos unos a otros, prevaleceremos y emergeremos más fuertes”. Y terminó con el slogan: “La salud de todos depende de cada uno de nosotros”.
Corea del Sur, por su parte, se ha mostrado capaz de responder rápida y decisivamente. Aunque el COVID-19 se apoderó inicialmente de ese país, ellos reaccionaron con una estrategia bien pensada. Actuaron temprano, con una respuesta muy coordinada y unida. Dicen que hay que planificar y mantenerse un paso adelante. Tomamos un enfoque de todo el gobierno. El Primer Ministro creó un grupo de trabajo de todos los ministerios del gobierno, y los gobiernos regionales y municipales, tomando en cuenta que son una democracia descentralizada. Esta estrategia les permitió que: “cuando una región se quedó sin camas de hospital, otras provincias la abastecieron. Y cuando alguna se quedó sin médicos, vino ayuda de médicos de otras regiones.
Según los funcionarios de gobierno, “la clave de su éxito ha sido la apertura, inspirar confianza y transparencia absoluta con el público de lo que está pasando”.
Para Corea del Sur, las pruebas se convirtieron en el curso de acción. Agregando que “las pruebas son absolutamente críticas con un virus tan rápido como este”. Algunos pacientes se les hacen las pruebas muchas veces, antes de ser dados de alta y garantizarles que están curados.
Los invito a conocer otras valiosas experiencias en mi próximo artículo.
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