Cepal sugiere apostarle al valor agregado y a la diversificación
Honduras debe apostarle al valor agregado y a la diversificación de las exportaciones para alcanzar una economía competitiva planteó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en su publicación “Patrones de desarrollo económico en los seis países de Centroamérica (1950-2018)”.
La investigación auspiciada por la embajada de Noruega y con el apoyo de la Fundación Friedrich Ebert, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales y la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), fue coordinada por María Castro, directora adjunta de la Cepal en México, Hugo Noé Pino y Wilfredo Díaz en el caso de estudio referente a Honduras.
María Castro indicó que Honduras se ha diversificado a lo largo de los años y tiene una matriz productora y de exportaciones más diversa de la que tenía hace 50 años, sin embargo, es muy poco el nivel de complejidad, referente al valor agregado de lo que se produce y de lo que se exporta.
“Los niveles de innovación que tienen estos productos que produce y que exporta es muy bajo”, expuso Castro para luego referir que “la demanda de mano de obra capacitada es muy baja también y por eso es que el nivel de productividad laboral nunca ha llegado a ser tan alto como el que hubo en la época de la industrialización”.
Por el lado positivo, Honduras tiene muchas oportunidades para innovar y darle mayor valor agregado, agregó, pero eso solamente se puede alcanzar con unas políticas desarrollistas y un Estado que pueda invertir de forma eficiente, eficaz, que provea de servicios públicos de calidad y no que solamente sea un instrumento para otorgar privilegios a los mismos de siempre.
“Se debe extender esa gama de política pública de calidad a toda la población para darle oportunidades a todo el país para complejizar su producción y se pueda tener un nivel de bienestar y desarrollo mucho mayor”, recomendó.
Con el cambio de gobierno la sociedad ha levantado niveles de expectativas muy altas y respecto a lo que pueda realizar en función de política pública, no solamente social, sino también productiva con nuevas formas de ver al aparato productivo y a los empresarios, generando políticas de competencia para que grandes y pequeños compitan en el mercado, de acuerdo con el análisis.
“Los mismos de siempre tienen el derecho de seguir teniendo sus empresas y de generar espacios de trabajo dignos y decentes, que provean niveles de salario que le permita a las personas tener una vida digna”, concluyó la directora adjunta de la Cepal en México.
DATOS
La diversificación puede definirse como la transición hacia una estructura más variada de la producción y el comercio internos con miras a incrementar la productividad, crear puestos de trabajo y sentar las bases para un crecimiento sostenido que mitigue la pobreza. Mientras, el valor agregado es la característica o servicio extra con el que cuenta un producto para dar mayor valor comercial mediante un elemento clave de diferenciación respecto a competidores.
PLANTEAN LA RENOVACIÓN DE PACTOS SOCIALES
Para alcanzar una economía competitiva, la región centroamericana también debe apostarle a la diversificación de su oferta exportable, así como renovar pactos sociales y reencontrarse, planteó el director de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), México, Hugo Beteta.
El economista consideró que hay mucha polarización, pues para la implementación de un nuevo modelo de desarrollo se necesita dialogar mucho, así como vincular más al Estado con las actividades de transformación productiva.
“Es necesario la inversión pública de calidad que complemente la inversión privada, pero con un rol más activo de los estados como un socio estratégico de la iniciativa privada que facilite y posibilite la inversión, la infraestructura, calidad educativa, en adaptación del cambio climático”.
La Cepal en su publicación “Patrones de desarrollo económico en los seis países de Centroamérica (1950-2018)”, expuso el panorama general del crecimiento y las transformaciones estructurales en la región entre mediados del siglo XX y el final de la década de 2010. En sus capítulos se identifican luces y sombras en la experiencia histórica de los países con el propósito de iluminar la reflexión sobre el futuro en los planes socioeconómicos y ambientales. A excepción de Costa Rica y Panamá, la región tiene variables similares.
